En qué consiste el acoso laboral.
El acoso laboral, también conocido como mobbing, es definido por los tribunales como “toda
situación o conducta que, por su reiteración en el tiempo, por su
carácter degradante de las condiciones de trabajo y por la hostilidad o
intimidación del ambiente laboral que genera, tiene por finalidad o como
resultado atentar o poner en peligro la integridad del trabajador”.
En
otras palabras, para que un tribunal aprecie que una persona está
acosada laboralmente tiene que estar sometida a una sistemática y
prolongada presión psicológica en el desempeño de su trabajo (se le
ningunea, hostiga, amilana, atemoriza, acobarda, asedia, atosiga, veja,
humilla, persigue o arrincona). Al atacar su dignidad personal se
persigue destruir su comunicación con los demás para que, perturbada su
vida laboral, abandone su puesto de trabajo.
En todo caso, para la
existencia de acoso laboral no es suficiente con un hecho aislado de
carácter abusivo –por muy reprochable que éste sea-; es necesario que se
trate de una serie de hechos recurrentes (al menos una vez por semana)
mantenidos durante un tiempo prolongado (al menos seis meses). Un
ejemplo habitual de acoso laboral es la eliminación de funciones o la
falta de ocupación efectiva, que puede ocasionar un problema de salud al
trabajador. Problemas que presenta el acoso laboral: dificultad probatoria.
Como
regla general, la parte que alega unos hechos tiene la obligación de
acreditar que los mismos son ciertos. La excepción a dicha regla lo
constituyen los casos de vulneración de derechos fundamentales en los
que se invierte la carga de la prueba. En los casos de acoso laboral el
trabajador tendrá que aportar indicios de la existencia de dicho acoso y
será la empresa la que tenga que acreditar que existe una justificación
objetiva y razonable de las conductas llevadas a cabo o de las medidas
adoptadas.
El principal problema al que se enfrenta el trabajador
acosado es el de acreditar los hechos y conductas que constituyen el
acoso, ya que uno de los rasgos característicos del acoso es que se
lleva a cabo con la apariencia de una absoluta normalidad y sin
prácticamente nunca dejar rastro por escrito. Qué hacer ante un caso de acoso laboral: recopilación de pruebas.
La
Sentencia de la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo de 20 de
noviembre de 2014 ha marcado un antes y un después en lo que a la
validez de las pruebas para acreditar la existencia del acoso laboral se
refiere.
Dicha Sentencia ha otorgado validez a la utilización de
las grabaciones magnetofónicas y de las conversaciones de whatsapp, al
afirmar que las mismas no vulneran el derecho al secreto de las
comunicaciones, siempre y cuando dichas pruebas sean utilizadas
únicamente por el trabajador acosado para defenderse en un procedimiento
judicial.
Además de las grabaciones y de los whatsapp, el
trabajador cuenta también con otros medios de prueba -que podríamos
denominar como “clásicos”-, entre los que se encuentran: el
interrogatorio de la persona acosadora, la declaración del trabajador
acosado, la declaración de testigos, el informe pericial
médico/psicológico en el que se delimite el diagnóstico clínico del
trabajador acosado y la causa del mismo, las actas de la Inspección de
Trabajo y los correos electrónicos. Cómo defenderse del acoso laboral: los distintos procedimientos legales
1)
Denuncia ante la Inspección de Trabajo: el trabajador puede presentar
una denuncia ante la Inspección de Trabajo, con el fin de conseguir que
un inspector constate de forma directa y personal los hechos denunciados
mediante la visita al centro de trabajo, en el que pueda acceder a los
testimonios de testigos, consultar documentos o verificar condiciones de
trabajo.
Las actas emitidas por la Inspección de Trabajo cuentan con
presunción de veracidad, objetividad e imparcialidad, por lo que es un
medio de prueba idóneo para utilizar en un procedimiento judicial.
2)
Procedimiento de tutela de derechos fundamentales y libertades públicas
(artículos 177 a 184 de la Ley Reguladora de la Jurisdicción Social):
cuyo objeto se limita al conocimiento de la lesión del derecho
fundamental o libertad pública. Tiene carácter urgente y no requiere
intento de conciliación previa en el SMAC (Servicio de Mediación,
Arbitraje y Conciliación), sino que se inicia directamente con la
presentación de la demanda ante el Juzgado de lo Social.
En dicha
demanda debe indicarse expresamente los hechos constitutivos del acoso,
el derecho o la libertad vulnerados, la cuantía de la indemnización
pretendida con especificación expresa de los daños y perjuicios
ocasionados al trabajador.
La Sentencia que se dicte declarará si
ha existido o no vulneración de derechos fundamentales o libertades
públicas y, en caso afirmativo, declarará la nulidad radical de las
actuaciones llevadas a cabo por el empleador, a la par que ordenará el
inmediato cese de la actuación, la restitución al estado anterior y el
reconocimiento de una indemnización por los daños ocasionados a la
víctima.
3) Extinción de la relación laboral (artículo 50 del Estatuto de los
Trabajadores): el trabajador puede solicitar la extinción de su contrato
de trabajo ante una modificación sustancial de sus condiciones
laborales que redunden en perjuicio de su dignidad, con derecho a
percibir la indemnización fijada para el despido improcedente (45/33
días de salario por año trabajado).
A dicho procedimiento es
acumulable la solicitud de una indemnización adicional por los daños y
perjuicios causados, siendo necesario en todo caso el intento de
conciliación previa (SMAC). La demanda que interponga el trabajador
tiene que contener el mismo detalle y precisión que la del procedimiento
de tutela de derechos fundamentales, y en ambos casos, es necesario que
la relación laboral se encuentre en vigor.
4) Procedimiento
ordinario: indemnización por daños y perjuicios. El trabajador podrá
acudir a dicho procedimiento en aquellos casos en los que el
hostigamiento psicológico haya cesado, bien porque la empresa haya
adoptado las medidas oportunas para poner fin al mismo, bien porque el
trabajador a consecuencia del acoso se haya visto apartado de su puesto
de trabajo, ya sea con motivo de una incapacidad temporal o permanente.
Dicho
procedimiento requiere intento de conciliación previa, y la demanda
debe contener el mismo grado de exhaustividad que en los dos
procedimientos anteriores, debiendo acreditarse expresamente la conducta
de hostigamiento y el resultado que la misma ha ocasionado en el estado
de salud del trabajador. Conclusión.
Cada vez son más numerosos los
medios de prueba al alcance del trabajador para acreditar la existencia
de acoso laboral. Además, existen distintos procedimientos judiciales
para poner fin a dicha situación. Sin embargo, los trabajadores
continúan enfrentándose a la dificultad que supone acreditar la conducta
de hostigamiento y el nexo causal entre la misma y su estado de salud;
ambos son presupuestos básicos de los que depende el éxito o el fracaso
de la demanda en el Juzgado.
EL MERCADO DE LIBROS DE PAPEL ES SUPERIOR AL DE LIBROS ELECTRONICOS. AMAZON HA ABIERTO UNA LIBRERIA.
Como si hubiera un sexto sentido, esas cosas pasan y se llaman casualidad, hoy Hoy "el país" publica un reportaje en el que se narra que el libro de papel sigue funcionando y que en el mercado no ha sido superado por el libro electrónico; lo cual nos viene a cuento del post que al respecto publicamos ayer.
En los comentarios vemos la eterna polémica de lo uno y lo otro.El electrónico cuenta con muchos problemas y detractores. También con muchos adeptos. Incluidos, los que aluden, al manido tema de la deforestación del mundo por el papel de los libros. ¿Ante lo que presento mis dudas al respecto?.
Queridos libros de papel, felicitarnos de que estamos vivos, y que gozan ustedes de buena salud. Y que los augurios del farenheit 451 no se ha cumplido, tal como pronosticaban algunos.
Tal vez eso nos ayude a que les bajen a vds. el precio y entonces se hagan vds. invencibles.
El álbum de los Grandes Éxitos de The Eagles superó a "Thriller" de Michael Jackson como el más vendido de todos los tiempos en Estados Unidos. Además, el disco Hotel California, de esa misma banda estadounidense, está en el número tres de la lista elaborada por la Asociación de la Industria Discográfica de EE.UU.
El disco de Grandes Éxitos de The Eagles va vendiendo 38 millones de copias en EE.UU., mientras que "Thriller" de Michael Jackson, va 33 millones.
En el año 1976 el grupo norteamericano Eagles lanzó una canción de seis minutos y medio de duración que, en mayo de 1977, alcanzó el número 1 en el ranking Bilboard Hot 100. Este mismo tema, con el paso de los años, se convertiría en un clásico instantáneo y en su single más famoso: “Hotel California”. Compuesta por el baterista y vocalista Don Henley, y los guitarristas Don Felder y Glenn Frey, la letra del tema hablaba, según sus autores, “del lado oscuro del sueño americano y el exceso en Estados Unidos”, especialmente el referido al uso de drogas duras.
Sin embargo, la canción, con el paso del tiempo, se convertiría en objeto de controversia, ya que algunos medios de prensa echaron a rodar una bola que aseguraba que la canción era satánica, y aludía en su letra a un lugar bastante parecido al infierno.
Los primeros rumores indicaban que el título “Hotel California” aludía al culto al diablo, pues supuestamente aludía a la dirección donde el famoso satanista Anton Szandor La Vey, quien se autoproclamó como el Papa negro o Papa oscuro, fundó en abril de 1966 la Iglesia de satán (California Avenue, en San Francisco). Estos mismos rumores aseguraban que en ese lugar los integrantes del grupo Eagles habrían hecho un pacto demoníaco y, después de realizarlo, habrían escrito la famosa canción.
La letra del tema, escrita por Don Henley, trata de un hombre que llega al misterioso Hotel California, un lugar “que podría ser el cielo o el infierno”. Allí es recibido por una mujer, que para algunos es una especie de sacerdotisa que quiere iniciar al recién llegado en la Iglesia de satán. Pero este forastero no es el primero en llegar allí, ya que escucha unas voces de bienvenida en el pasillo, de los acólitos que forman una especie de misteriosa congregación, misteriosa porque “son prisioneros allí por su propia voluntad”. Más adelante, las mismas voces lo despiertan a la medianoche, para que participe en una especie de ceremonial. El hombre contempla el ritual de un sacrificio donde se usan “cuchillos acerados”, pero el sacrificio no se consuma porque “no se puede matar a la bestia”. Así que el forastero, impresionado por lo que ha visto, opta por echar a correr hasta la puerta para intentar escapar de ese lugar profano. Sin embargo, un “hombre de la noche” le dice unas enigmáticas palabras que lo dejan helado: “Puedes cancelar tu reservación cuando quieras, pero no puedes marcharte nunca”.
Los extractos supuestamente satánicos de la letra de la canción “Hotel California” se centran sobre todo en la frase “They stab it with their steely knives, but ther just can´t kill the beast” (“Ellos le apuñalan con sus cuchillos de acero, pero no pueden matar a la bestia”), que aludiría, según algunos, a rituales satánicos de sacrificios. Otra frase de la canción dice: “He said “We haven´t that spirit here since 1969″ ” (“Él dijo:”No hemos tenido ese espíritu desde 1969″), que aludiría según algunos al año en el que se publicó la “Biblia satánica”, escrita por el mencionado satanista Anton Szandor La Vey.
Tampoco faltaron los que aseguraron que había un mensaje satánico oculto en la canción, pues si la frase “This could be Heaven or this could be Hell” (“Esto puede ser el Cielo o puede ser el Infierno”), se reproducía en sentido inverso, supuestamente se podía escuchar el siguiente mensaje: “Yeah, Satan. How he organized his own religion / Yeah, well he knows he should. How nice!” (“Sí, Satán. Cómo organizó su propia religión. Sí, él sabe bien que lo haría. ¡Qué maravilla!”).
La última frase de la canción es una de la más explícitas en cuanto a la posible referencia al infierno: “You can check out anytime but you can never leave” (“Puedes cancelar tu reserva cuando quieras, pero no puedes marcharte nunca”), aunque algunos fanáticos aseguran que toda la letra de la canción alude en realidad a la estadía de un paciente en el hospital psiquiátrico estatal de Camarillo, situado entre Los Ángeles y Santa Bárbara, que cerró en 1997 y al que se le llamaba precisamente Hotel California. La canción, entonces, relataría la experiencia de un internado en ese hospital. Otra interpretación parecida aseguraba que el Hotel California era una clínica de rehabilitación para que los drogadictos se recuperaran de sus adicciones.
Los rumores de satanismo no sólo afectan a la letra y al título de la canción, sino que también afectan a las fotos utilizadas para la portada y la contraportada del disco en el que aparece el tema, titulado de igual forma.
La portada muestra un hotel de estilo español, del cual se decía que era el cuartel general de los miembros de la Iglesia de satán, aunque en realidad la fachada corresponde al Hotel Beverly Hills, conocido como Pink Palace y ubicado en la avenida Sunset Boulevard. Pero, en la carpeta interior del álbum, aparece una foto con el grupo en pleno posando en el vestíbulo de otro hotel (el Lido de Hollywood). Si se mira con cuidado hacia la parte superior, en uno de los balcones, en medio de la penumbra, aparece un tenebroso y misterioso personaje, calvo y con una afilada barba en forma de perilla, de quien muchos aseguraron que se trataba del mismo Papa negro, Anton Szandor La Vey. La banda, consultada por este hecho, sólo replicó diciendo que se trataba de una planta decorativa y, mucho después, afirmó que era una persona que se puso en el balcón por error.
Con respecto a la existencia real del Hotel California, la verdad es que sí existe un Hotel California en Todos Santos, en la península de Baja California, México, pero los integrantes de los Eagles aseguraron que jamás habían pasado la noche allí, por lo que era imposible que hubieran escrito la canción en ese lugar. Don Henley, el líder del grupo Eagles, explicó que “a lo largo de los años escuché rumores sobre ese hotel, pero puedo decir inequívocamente que ni yo ni ninguno de los otros miembros de la banda hemos tenido ningún tipo de asociación – por negocios o placer – con ese establecimiento. Ese hotel fue establecido después de que nuestro tema “Hotel California” se volviese popular y parece ser un intento ostensible de capitalizar con la popularidad de la canción”.
El mismo Henley negó de plano que la canción “Hotel California” aludiera al satanismo, pues en realidad “capturaba el espíritu decadente de la época, un tiempo de grandes excesos en este país y en el negocio de la música en particular”. El guitarrista Glenn Frey, en tanto, especificó que la canción hablaba de la adicción a la cocaína, un metafórico “hotel” del que es imposible escapar una vez que se ha entrado en él. “La canción ‘Hotel California’ habla en contra del exceso de cocaína. Nosotros no siempre hemos hecho las cosas con moderación, pero nos estábamos imaginando cómo te quemas lentamente, en el largo plazo, por el uso de drogas”. Con respecto al supuesto mensaje satánico que se puede escuchar si el tema se reproduce al revés, el segundo bajista de los Eagles, Timothy B. Schmit, afirmó que “lo único que pasa si pones el disco al revés es que se va a rayar. No hay nada de eso en ese disco”.
Para algunos, los rumores de satanismo que rodean a la canción “Hotel California” no son para nada infundados, mientras que para otros el significado real de la canción sólo alude al espíritu de exceso y decadencia que caracterizó a los lejanos años 70’, década donde vivió su época de oro el denominado rock clásico.
Recreación do asasinato de Xoán Andeiro a mans do mestre de Avís, futuro
rei de Portugal.Óleo de 1860 de José de Sousa custodiado no Museo
Nacional de Soares dos Reis de Porto.