Santander fue en la post-guerra una cuna
cultural y burguesa de la época. Fue denominada la Atenas del Norte. Cito a
Morán en su “el cura los mandarines”. La
verdad es que varias ciudades se consideraban
la Atenas de etc. Por considerar que todos tenía un alto nivel cultural
de escritores, editores etc. Santander si lo demuestra Morán con datos y
nombres que yo ni imaginaba que eran de
allí, aparte de Polanco, Aguirre, Pereda etc. Muchos como es lógico unidos a
grupos religiosos tipo Opus Dei.
En el año 1941 se exhibió una película en Santander que tuvo muchas protestas de grupos religiosos
que dominaban la vida cultural y la política, entiéndase como tal el
poderosísimo Gobernador Civil. La película era considerada licenciosa en cuanto
al tratamiento de los escabrosos asuntos sexuales. Ríase Vd. Viendo hoy el tema
como sería el problema para aquella España triunfante que había ganado una
guerra y pasado una escoba profunda sobre costumbres, ideas y personas de
pensamientos irregulares.
Ese mismo año 1941 Santander sufrió un terrible incendio que dejó destruida
la ciudad.
¿Tiene esto algo
que ver? ¿A dónde vamos?
No tendría nada
que ver. Excepto si uno de estos grupos religiosos con influencia social y
política en la ciudad, hacía predicación y pedagogía de que la relación
causa-efecto de la película y el incendio eran evidentes. Que la mano divina
había utilizado el mal contra aquellos
que habían utilizado la blasfemia y el pecado. Vamos que Dios se había
enfadado, pero bien. Ellos pescaban en aguas favorables porque antes habían
hecho causa contra el filme y amenazando con la ira divina.
Pero esto viene
a cuento porque es para mí un “dejá vu”, de algo parecido que encontré en la
historia de Portugal. Me explico. En la historia de Portugal existe un
personaje muy importante y controvertido (aunque no sé por qué). Estoy
refiriéndome al Marqués de Pombal. Pombal era el jefe de Gobierno del Rey José
I creo que era. Nos situamos en el siglo XVIII. Era masón y anticlerical o al
menos no mea pilas.No se llevaba muy bien con la Iglesia, como es lógico y
menos con los Jesuitas que tienen en ese una gran influencia en la monarquía lusa y en
el vaticano. Los Jesuitas son la orden religiosa que trabaja directamente para los intereses del
Papa de una manera especial y está antes por hacer valer al papado.
En esa época Lisboa sufrió un terrible terremoto-Tsunami, que destrozó la ciudad. Los
Jesuitas, especialmente el confesor de la reina, el padre Malagrida, extendían
por todo Portugal que la causa del terremoto había sido el enfado de Dios por
tener un masón de secretario real. Más tarde Pombal expulsó a los
Jesuitas, y también fue ejecutada una
familia importante, los Távora, que hacían oposición al Rey y especialmente al
Secretario Pombal.
Por cierto Pombal
sería una figura clave en la historia de Portugal, gran reformador y modernizador
del País. Reconstruyó Lisboa y es obra suya toda la arquitectura y diseño de la
Baixa lisboeta, hoy tan visitada y admirada.