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viernes, 17 de diciembre de 2021

O ofício de deturpar o relato.

     


 Andando pola rua, nesta  manhã fría com  mestura de néboa e giada , adianto a dous homens, já  maduros pela  sua aparência. Vão ,com fatos deportivos , em animada conversação  depois de dar uma caminhada manhaneira. O seu tono de voz é o suficintemente alto para eu ouvir a sua conversa,  no pouco tempo que me da o ir diante deles  e  com dissimulação  para que eles não notarem o meu interesse no que estão a dizer. 

      Falão em castelhano com forte sotaque do  castelhano  ourensám.  "Es que esto se está poniendo muy mal, " "Es que ayer sabes lo que dicen que dijo la ministra de trabajo en el Congreso. Le dijo a Vox que ellos nunca gobernarían y que si llegan a gobernar iban a tener las calles llenas de gente". O outro parecia  apanhar o mensaxe,  mas nem dixo nada. No entanto  o tema  parecia estava  aberto e a sua conversa  parecia seguir co mesmo guião. E eu só puidem , de forma disimulada, escutar esta parte tão sustanciosa do  relato. O meu talento e habilidade como espia já não me dava pra mais.

      Senti pena. Tal vez não seja tão  importante , ou podemos vê-lo como habitual, que o é. Mas não me gusta viver num pais enchido de sectarismo. O corpo daba-me para deter-me e dizer-lhe: o desculpe,  senhor, mas ouvi o debate o que está  a referir-se, embora o relato  acho está um bocado ou um moito deturpado.  Pois ela, a ministra,  pareceu-me que dixo, depois de expôr pontos do programa económico e social de Vox: "   Con este  programa si vds. gobiernan si que  tendran manifestaciones en la calle". No contexto tanto da pergunta como da resposta en ningúm momento se deu a impressão que estava a ouvir que a ministra fixera uma exaltação a revolução e a toma das ruas pelas masas proletarias. Ela estava a dizer que naquel programa, que exhibia e lia  varias vezes, era tão lesivo para os dereitos laborais dos trabalhadores que  não poderiam  impedir as manifestações na rua dos trabalhadores. Na prensa, especialmente de dereitas, nada se dixo o respeito de esa intencionalidade sobre as palavras de Iolanda Díaz em resposta a Macarena Olona de Vox. E já  seria raro que não fosse manchete  (ou titular) de varios jornais, radios e televisões.

     O relato, trasladado mal de forma intencionada, ou mal compreendido, foi , a sua vez, divulgado até chegar a este homem que a sua vez probablemente deulhe um embrulho sectario que ele a sua vez estava lançando qual bola de neve. Uma mentira , um fake, sim. Embora  um monte  mais de falsos mitos, têm a inteção de forma sucinta  de fazerem  acreditar     que neste momento há umas forças organizadas que não permitirian governar a dereita se ganha-se as eleções. Salvando as distancias  ( que são moitas)  parece uma analogia daquelas divulgacións , lendas e relatos que se foram fazendo antes do 1936, de que  estava-se a organizar  um contrapoder dictatorial  ruso-comunista para governar Espanha.   Relato utilizado naquela altura, para xustificarem uma sublevação contra a República, e que durante muitos anos foi a explicação mais resumida do porqué daquela guerrra. Lendo hoje entre outros a Angel Viñas demostra documentalmente a falsedade, mas foi uma mensagem que calhaou moitos anos na população em geral, sem mais. 

      E difícil ser objectivo ou quase imposível ser objectivo no relato  de contar a historia. Mas, ainda que não seja posivel, acho que sim pode ser  intentar não deturpar a mensagem, sermos honestos simplesmente nos factos  além de ideologias, ou maneiras  diferentes de vermos a realidade.

     Seremos capazes, oh que lindo sería. 

 

 P.S.    22-12-2017. 

     Esto pasou quince días despois da controversia do relato anterior. No Parlamento Macarena Olona voltou a pedir contas pois não quedou contenta ou mais bem , a juzgar pelo tono um pouco adoecida. 

    

La portavoz adjunta de Vox, Macarena Olona, ha interpelado este miércoles a la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, de la que ha dicho que "hay que ser muy fea para atreverse a amenazar a millones de españoles en el templo de la palabra", para amenazar: "Cuando Vox gobierne, sus perros rabiosos, los sindicatos de clase, no van a recibir ni un solo euro de financiación pública. Y cuando Vox gobierne y al frente del Ministerio del Interior esté una persona de ley y orden, nuestros agentes podrán actuar con absoluta libertad y criterios operativos sin injerencia política".

Olona ha llevado a la sesión de control en el Congreso una copia del documento de Vox Agenda España, con una "dedicatoria personal" para la también ministra de Trabajo, que ha leído en el Hemiciclo: "Para Yoli, que aspiró a lideresa mundial y no pasó de Fashionaria. Que la Agenda España, el programa de Vox, sea el recuerdo permanente de su traición a la clase obrera española. Con cariño, Maca, que cada miércoles disfruta despojándole del falso hábito que muestra y enseñándole la fealdad que esconde".

La vicepresidenta segunda ha respondido en su turno: "La política no es esto que usted hace aquí. La política no consiste en insultar ni difamar al adversario. La política es algo noble. Deberían aprender de la lección de Chile: las mentiras y el odio tienen las patas muy cortas".

Como ya hiciera la semana pasada, Díaz ha desgranado parte del programa de Vox y ha mencionado tres medidas, la 26, la 33 y la 70. "Proponen levantar un muro en Ceuta y Melilla. Proponen salir del espacio Schengen, que es como salir de la UE. Y quieren derogar la Ley de Violencia de Género", ha apuntado. Y ha añadido: "No solo eso, en plena pandemia quieren salir de la OMS".

"Los españoles tienen derecho a saber lo que defienden", ha replicado. "Su intervención ha sido muy clara, pero España es mejor de lo que ustedes proponen".

    Este texto foi escrito com a ajuda : 

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jueves, 4 de noviembre de 2021

Ser peligrosa

         Lo pongo aquí, porque lo veo muy esclarecedor. Vale para cualquiera.

Ser peligrosa

Hay una táctica muy seguida en política que es alabar al que estuvo antes que tu rival. A Zapatero le decían que no le llegaba a la suela del zapato a Felipe González, a Mariano Rajoy que no tenía la altura política de José María Aznar, a Alberto Garzón que era un piernas si lo comparaban con Julio Anguita. La otra es alabar al que, sacado del juego de la política por diferentes razones, nunca obtuvo buenos resultados a pesar de su increíble valía. Ya no queda, dicen enfrente, gente como Edu Madina, Borja Sémper o Toni Roldán. También se da el caso del que pasa de ser un demonio bolivariano a un estadista inabarcable cuando salta de un proyecto ganador a uno en el que no transmite peligro, como Íñigo Errejón. En general, los rivales, que no necesariamente tienen que venir del lado opuesto ideológico, son mejores cuando ya no están o no pueden ganar

Pocos políticos, quizá ninguno, obtuvieron tan altas cotas de impopularidad entre sus rivales como Pablo Iglesias. Cada cual tendrá sus razones para explicar el porqué, pero es un hecho que se convirtió en un icono del mal a su derecha y más a su derecha. Quizá el motivo principal fue ser la punta de lanza del movimiento que acabó con el bipartidismo en España, que no es poco decir ni mucho menos. Por eso, por ser unánime el odio externo y parte del interno, parecía improbable que fuera a seguir con la tradición de ser alabado para matar al siguiente, toda vez, además, que lo que se reclamaba de Iglesias era justo lo que ofrece su sucesora. 

Pero como la vida es así de sorprendente, ya hemos asistido a las primeras consignas filtradas, juicios mediáticos paralelos, momias políticas del pasado parlantes y ofensivas de fuerza baja y media para deslizar el mensaje de que Yolanda Díaz es peligrosa. Si para Rodríguez Ibarra es peligrosa para el PSOE, no cabe imaginar el tamaño de la amenaza que supone para la gente que está más a la derecha de Ibarra, que tampoco es tanta. Una vez instalado desde la extrema derecha el fantasma del comunismo sobre los hombros de la gallega, desde ese entorno del ala más conservadora socialista se empieza a colocar el runrún de que la vicepresidenta de su propio Gobierno es malvadilla. Incluso, según publicaba El Mundo de fuentes del entorno (cuánto entorno hay en el PSOE) de Nadia Calviño, se desataba el anatema: Yolanda Díaz es más peligrosa que Pablo Iglesias. Que ya es peligro. Acabáramos.

Quedan dos años para las elecciones y parece evidente que Yolanda Díaz debe resguardarse de la primera línea política lo más que pueda para evitar el fuego a discreción que se le avecina, toda vez que su crédito está más que conquistado. Hará bien en mojarse poco, más teniendo en cuenta que ha sabido elegir la gran batalla de la derogación de la reforma laboral para (a día de hoy) ganarla. El vencedor de la guerra se certificará cuando se ponga negro sobre blanco. Cualquiera que conozca la historia reciente de este país sabe que raro será que no haya más capítulos.

La cuestión de todo esto no es ser peligrosa, sino ser peligrosa para quién. Yolanda Díaz lo es. Ha decidido que para mejorar las condiciones laborales de los trabajadores de España hasta los límites que el estado de cosas actual permite va a ir con todo. No conviene olvidar que ya le costó una baja porque su físico lo pagó. De lo anchas que sean sus espaldas y de saber medir su amenazante veneno de los derechos laborales dependerá, en gran parte, que la izquierda a la izquierda del PSOE sepa armar el proyecto más ilusionante electoralmente desde, vaya por dios, el que lideró Pablo Iglesias en 2016.

jueves, 21 de octubre de 2021

Sr. García Egea le voy a dar un dato.

 

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     Se está haciendo viral y jocoso, que cada quince días en la sesión de control al Gobierno la pregunta del diputado del Partido Popular Sr. García Ejea a la ministra Yolanda Díaz, recibe una respuesta mesurada en el tono y cargada de datos. La ministra, normalmente en segunda réplica, inicia su respuesta con ....Sr. García Egea le voy a dar un dato, o le voy a dar datos. Es ya un clásico. La coletilla sirve de inicio y anuncia un torrente de datos estadísticos y económicos que no admiten debate. Los datos cierran de forma objetiva la pregunta que sirve de introducción a la retaila de frases del Diputado. El diputado utiliza un tono y una forma de preguntar que roza la frivolidad y que parece más de consumo entre sus amigos de tertulia que del parlamento. Si quiere preguntar a la ministra que piensa hacer ante la bajada de la luz, antes hace un recorrido sarcástico contra Podemos, resume el ambiente político etc. etc. y parece buscar que en frente se encuentre un mihura que le entre al trapo de las mentirijillas y sesgadas informaciones que trae. Es lo que busca evidentemente. Lo malo es que enfrente se encuentra una mujer y eso cambia un poco la cosa. Lo cambia porque el se corta un poco al preguntar o hacer comentarios,  no vaya a ser que meta la pata faltándole. Ella obvia todo el atrezo de la pregunta que lo que busca es provocar y en primera contestación suele limitarse a  hacer visible la frivolidad de los comentarios del diputado, sin entrar en ellos  y lo deja correr; en segunda respuesta,  después de que el diputado,  siempre de forma cíclica le dice que no le responde a lo que pregunta,  ella tiene el dato preparado y le contesta con el "no se si vd. sabe que"..... y " le voy a dar un dato"... y le  suelta datos concretos y comprensibles para la gente. Todo ello con un tono dulce, con el tonillo galaico-ferrolano "le voy a dar un dato...", sin alterarse, pero transmitiendo seguridad. El caso es que todo el mundo tiene la sensación de que García Egea sale compungido con la respuesta de la ministra. Ella tiene la ventaja de que cierra el debate y tiene de verdad los datos que si le favorecen puede arrasar, no le interesa entrar en otro terreno de un ocioso diputado de la oposición . 
     El caso es que la  verdad que el hombre cuando toca preguntar parece que cada vez se corta más, con Pablo Iglesias enfrente parecía disfrutar  y estaba más  suelto. Le iba la marcha, esperaba más el aplauso de la grada y se sentía  fuerte ante  la responsabilidad en que le pedía su  afición de meter en vereda al coletas y soltarle juntas todas las maldades que el ímpio estaba cometiendo. Ahí estaba él. Entonces  no medía tanto sus palabras. Aquí, ahora, más bien , como diría Valdano, hay miedo escénico.
      Las redes sociales se hacen eco de su sufrimiento cada quince días y lo celebran de forma irónica y cómica, con memes y comentarios de lo más jocoso para casi todos, menos seguro que para él, o no. (Rajoy dixit)
      Son las cosas simpáticas de la política. Este enfrentamiento, no es tal y nunca llega a la crispación y al odio, por lo menos eso es lo que nos llevamos. La sonrisa de Yolanda Díaz y la comprensión ante las preguntas de un diputado campeón en lanzamiento de huesos de aceituna.   Sin testosterona la acritud disminuye, bueno exceptúando a la diputada Olona de Vox. Siempre hay excepciones que confirman la regla.