sábado, 6 de abril de 2019

Cuando fui Suetonio. I

Escrever é esquecer. A literatura é a forma mais divertida de olvidar a vida (Fernando Pessoa)



Aquí unos extractos de   unos escritos sin editar llamados :  "Cuando fui Suetonio". Historia de alguien,célibe y agente secreto  de una Organización mundial, muy célibe y muy secreta, ligada a intereses muy vaticanistas. 

 Capítulo II.   Capítulo III.

 Introito 
León . Abril 2017
    Un día recibí un email  sorpresivo. Un antiguo amigo, me escribía y me mandaba un archivo con unos escritos que narran hechos personales , titulados  "Cuando fui Suetonio". Quien me remitía esto era mi amigo de la infancia y de internado, en el seminario salesiano  de  Cambados,  Carlo Andai Amodo. Nos habíamos conocido y convivido en  Cambados con los padres Salesianos. Aquellos años oscuros y de despertares sociales y cambios  que eran la década de los setenta nos dejó marcados más allá de lo mucho que nos aporto a la vida. Sea como fuera, había sido nuestra vida y era la mejor del mundo. Allí en Cambados, a medida que  el tiempo nos iba haciendo mozos nos fuimos desgajando unos de otros,  por vicisitudes varias que iban surgiendo. Nosotros tampoco controlabamos ni teníamos medianamente programados nuestros futuros. Cada uno era de una zona de Galicia, de Asturias y León. Personal vario, predominantemente rural, de familias de origen pobre como el ochenta por ciento de la población de la época, pero que empezaba a emerger social y económicamente. Nosotros eramos la divisa,  en muchos casos de sagas familiares, que por primera vez en su historia tenían a alguno de los suyos, dedicado al estudio y no ya al trabajo de supervivencia. Como es lógico fuimos  perdiendo  el contacto a medida que iban saliendo otros horizontes, incluidos los de continuar desarrollando  la vida  eclesiástica, que en principio era el fin para el que estabamos allí, se suponía.
      El email que pongo a continuación fue  en principio  una sorpresa y  la vez  un reto   reto de emociones y aventura. Orgulloso por un lado  de que me hubiera elegido a mi para comunicar lo que quería decir. Por otro lado pensaba que tal vez me estaba utilizando y que fui lo más fácil que  encontró casualmente para contactar con alguien de la infancia, que eso mismo se lo podía haber ofrecido a otros. El caso es que con todo lo que vivió tantos años después de dejar de vernos, veinticinco concretamente, me resultaba raro  que no hubiese tenido otro contacto de confianza en su vida para depositar y hacer públicos estos escritos que parecían unas memorias. No lo pensé más, y me situé en la parte romántica de la situación, o sea quise ver que tenía que responder a un  potencial que llevaba dentro y que me habían impuesto en mi educación del colegio, y la lealtad a   las amistades  indelebles de la infancia,  que formaba parte de la educación recibida,buena y exclusiva que de  aquellos años. Educación  que parecía nos marcaba a fuego a unos con otros. Me quedé con este pensamiento positivos , y así me expresaba los suyos Carlo, por eso estoy publicando esto.

 De Carlo Andai Amodo para Manuel.  
Querido  Manuel, tal vez te sorprendas al recibir este email y el archivo adjunto. Primero saludarte, fuimos compañeros en nuestra infancia-adolescencia en el seminario en Cambados. Hace muchos años que no sabemos nada el uno del otro, pero facilidades que da la vida, por medio de las redes sociales he sabido de ti, un mundo nuevo de encuentros  que nunca imaginaríamos, nos permiten volver a retomar nuestras vidas.  No me he atrevido a ponerme en contacto contigo por razones que tal vez más tarde comprenderás, pero sé más o menos de tu vida, de tus pensamientos y tus inquietudes. Una vez más gracias a las redes, a los algoritmos, a San Google y demás corte celestial de la Internet.  Me alegro de  como te va, y te sigo a diario. 
Las nostalgias de los tiempos pasados son imborrables y nuestra vida tan estrecha en el internado más. Me hace mucha ilusión poder contactar contigo aunque sea tarde y de esta manera. Como ya te dije, te  leo en las redes y también sigo tu blog,  de bloguero aficionado. Esta afición tuya, mi antigua amistad, tu sentido de la lealtad así como tu inquietud por la información es lo que me ha animado o me anima  a darte  estos escritos  que iba a llamar memorias, pero me parecía excesivo y quise titularlo  "Cuando fui Suetonio", que son más o menos parte de lo que ha sido mi vida. Digo parte, porque el resto es interesante como la de tanta gente, pero que no están ahí. Cuando hablo como Suetonio es para dar a conocer que hice con mi vida durante quince  años arrastrado a vivir para una organización secreta muy especial. Dejé un buen puesto de funcionario público, me sumergí en un mundo nuevo, viví el vértigo de una nueva vida arrastrado a ello por nuestro amigo en común Cosme Danoz Freijedo, al que conocimos los dos, y tratamos, en  Cambados.  Nadie me obligó a ello, el riesgo, la aventura y el cambio de  una vida rutinaria y vulgar, y la amistad me empujaron a ello. No me arrepiento, porque siempre me quise a mi mismo con mis errores, pero si daría marcha atrás, si pudiera, pero son tiempos pasados.
Con lo que te mando no  busco popularidad, ni comprometerte. Sólo es necesidad. Necesidad de  que  alguien me escuche, y que con esa información haga lo que quiera.Necesito contarlo. El silencio ahoga y mata, la comunicación nos libera.  Te he elegido para ello a ti y tal vez a todos los que lean esto  algún día, si tu lo ves factible,  contarlo. Me emociona el pensar que aunque sea en futuro alguien me entienda,  y se acuerde de mis experiencias vividas.  Es humano, creo que lo entenderás.
Mi vida, ahora mismo no está segura del todo, corro peligro, tengo certezas de que  puede que en no mucho tiempo desaparezca. Cosme murió, o lo mataron,tal vez nunca lo sabré. No te diré donde estoy ahora y que hago porque  no quiero que otros con aviesas intenciones se enteren. Cuando leas a Suetonio tal vez  comprendas el porqué de mi silencio y me agradecerás que no te comprometa más. El material que te doy también es peligroso para ti, así que depende del peligro que   quieras correr, pero mi intuición me dice que  te va a poder más  la emoción  que la cautela y que algún día lo publicaras y alguien lo leerá  y lo refundirás  y así se sabrán algunas cosas que no se saben. Yo me sentiré contento, si eso ocurre, y siempre se hará más bien publicándolo que tirado en un pozo. 
Querido Manuel, decía Borges, que el silencio es la mayor venganza sobre el otro. Aunque  conozcas sólo tu lo que cuento ya me siento libre, todo menos  el silencio. Tanto secreto, tanto dolor en solitario me ahoga, necesito el aire de los demás, como cualquier humano. Cuando leas mis escritos,  comprenderás que  esas ganas  que tiene  la gente de contarlo todo,  ha sido el objeto del trabajo de Suetonio en estos años.  El enterarme de lo que  sabe y piensa la gente  del día a día ha sido mi trabajo secreto en estos años que te cuento. Me quiero liberar de haber comercializado o trabajado en explotar el sentido noble de ser humano para que sea utilizado por intereses que nunca pude saber cuales eran. Como si quisiera devolver a los demás parte de su intimidad y pedirles perdón.
 ¿Y porqué el nombre de Suetonio?. Supongo te habrás ya preguntado. Suetonio era  el alias por el que me conocían en  el trabajo  de la organización a la que pertenecí y que al leer los escritos entenderás un poco más de que va. Es lógico que sea yo con ese nombre que cuente lo que pasó, cuando me llamaban Suetonio. Pero el nombre no fue de todo al azar, tiene que ver con nuestros recuerdos de estudiantes de bachillerato. A la hora de buscar un nombre me acordé de D. Wenceslao y sus clases de latín. De aquel hombre ilustrado y ya muy moderno, aprendimos mucho,  ¿ Te acuerdas?. Nos hablaban casi en latín, acababa de venir de Roma  de la Universidad. Nos enseñaba a pensar críticamente, nos decía cosas que nunca habíamos oído, nos hacía ver la televisión y los periódicos con pensamiento crítico.  En el fondo  de una manera muy especial nos ponía contra el Régimen. D. Wenceslao era una persona maravillosa, una joya en aquél mundo cerrado, antiguo y pétreo. Una suerte para nosotros. Que recuerdos más maravillosos de aquellas clases y del ambiente que creaba a su alrededor. Era también entrenador de basket, algo que se estaba iniciando aún, pero él ya iba adelantándose a su tiempo. D. Wenceslao una vez nos citó  en clase al historiador y biógrafo romano, Suetonio. Y nos lo  presentó y nos habló de él , pues como el hacía y comunicaba, que al final hacías tuyo para siempre el personaje, su historia. Su nombre completo era Gayo Suetonio Tranquilo y fue un historiador y biógrafo romano durante los imperios de Trajano y Adriano. 
  Querido amigo, termino ya, te agradezco mucho,  el que me recibas esto. Queda en buenas manos. No te esfuerces en contestarme, no será posible, cuando lo vea oportuno me volveré a comunicar contigo y si fuera todavía más posible me gustaría verte en persona y comer, departir  y recordar viejos tiempos. 
Que disfrutes de tu ciudad, León, de la que tanto nos contabas en el colegio y de lo orgulloso que estabas  de ella. Es para mi un mito de ciudad gracias a ti. 
  Un abrazo, querido amigo. 
......





        



Conocer el cerebro para vivir mejor. Facundo Manes, neurociencia.



LA EDUCACION:
Es lo que cambia la vida de las personas. Nos hace más libres, nos aumenta la autoestima, nos permite conocer mundo y es lo que más protege nuestro cerebro.
El éxito no viene sólo de uno, viene de la gente inteligente con la que te rodeas y es el fruto de mucha gente a nuestro alrededor.
EL CONOCIMIENTO:
Hoy la sociedad está basada en el conocimiento. Hoy vivimos en la Revolución del Conocimiento. ( igual que hubo una revolución agrícola, una idustrial etc.). Lo más importante que tiene un país hoy es el cerebro de su gente. La economía, las economías, la economía global está basada en crear nuevas ideas y saber implementarlas.
Hoy los recurso naturales no son tan importantes. Lo más importante es el cerebro de los habitantes del país, ese si es un recurso natural fundamental.
ENTENDER NUESTRO CEREBRO:
Nos permite conocer el órgano más complejo del universo. Sacar como conclusión que la mejor inversión de una sociedad es la que se hace en el cerebro de sus habitantes, en su educación y formación.
EL BIENESTAR Y LA FELICIDAD:
Una faceta que nos proporciona bienestar individual es el altruismo, el ayudar a los otros. Con la salvedad que los seres humanos somos la única especie que podemos ser altruistas con lo que no vemos. Con lo que vemos delante lo compartimos con las demás especies. Nosotros podemos imaginar y ser altruistas con lo que no vemos y ello también nos da placer. Podemos ayudar a refugiados, al tercer mundo, paliar el hambre de gente que no vemos.
      El 30% de nuestro bienestar es fruto de la genética, ( antes se creía que era el 50%).

LA INTELIGENCIA COLECTIVA :
És más que la suma de las inteligencias individuales. Es algo más. Ha sido una de las causas de la evolución y progreso del hombre. Podemos hacer cosas en conjunto aprovechando los recursos de unos y otros. El trabajar en equipo produce satisfacción y bienestar a la vez que progreso.
Tes factores necesarios para conseguir el éxito del equipo:
- Altos níveles de EMPATÍA. Tanto del conocimiento como emocional. Saber cosas que hacen o le pasan a los otros, pero tener capacidad de sentir sobre esa información del otro. El saber que a un miembro del equipo le han dado un premio y a la vez sentir la alegría que siente él con ese premio.
-Que además de la figura del líder tiene que haber más voces dominantes en el equipo.
-Diversidad de género en el equipo.


PARA CONSEGUIR EL BIENESTAR :
      Es necesario  dejar claro que  nuestro cerebro es un órgano fundamentalmente social. LOS VINCULOS HUMANOS proporcionan a través de nuestro cerebro  Bienestar. Estar conectado socialmente con humanos es tan necesario para nuestro cerebro como comer para el cuerpo. Somos seres sociales. Esencialmente sociales.
       La gran ventaja de nuestro cerebro y que nos ha hecho progresar como especie es que la complejidad de nuestro cerebro se adapta a la forma de vivir humana en grupos grandes y complejos, eso fue fundamental  para que los humanos como especie nos  impusiésemos a las demás especies.
      1.- LA SOLEDAD ocasiona problema de salud. Se  conoce que el aislamiento social crónico es un factor de mortalidad importante en nuestro días. El vínculo diario con humanos, el cara a cara, incluido el vínculo humano superficial del hola y adiós es muy importante para el funcionamiento de nuestro cerebro. Este contacto humano no es sustituido por la tecnología o la relación virtual, necesitamos la relación face to face.Esta relación es la que nos da realmente bienestar.
     
      2.- Otro aspecto muy importante en esta búsqueda del bienestar que  TENER UN PROPÓSITO en la vida. Algo que exceda de uno, un sueño. Ello es muy importante para la felicidad.

      3.- EL FOCO en el presente, en lo que hacemos, o lo que podíamos entender por concentrarnos en la realidad, ocasiona momentos generales de bienestar. No es fácil, porque el ser humano tiene una cualidad que es una ventaja como especie y que consiste en imaginar. Esa imaginación nos lleva a recordar  escenarios pasados y crear escenarios futuros. Eso que es  bueno y grandioso puede ser una trampa que nos ocasiona ansiedad y estrés cuando estamos en el presente y ya estamos viendo lo que tenemos que hacer o pensando en lo que fue. No nos deja disfrutar y sacar el máximo rendimiento a la actividad presente que estamos realizando.
       Así pues un cerebro  atento es más eficaz y feliz porque nos saca del circuito de la ansiedad. Podemos  sintetizar que para alcanzar más bienestar TIENES QUE DISFRUTAR DEL PRESENTE.

      4.-  El conseguir un estado de Flow, de concentración en algo que nos gusta mucho, es positivo para el bienestar más allá de que  es cuando somos más creativos y eficaces.
       Lo que estamos llamando  estado de Flow es la situación en que nos encontramos cuando estamos enfrascados en alguna cosa que nos  gusta mucho. En ese momento el mundo desaparece, estamos focando nuestro cerebro y estamos a la par disfrutando y en plenitud. Este estado es óptimo para la creatividad y nos produce mucho bienestar.       
Hasta aquí: Minuto 16.

      5.-  Otras cosas que nos ayudan  a conseguir el Bienestar- felicidad  pueden  ser:
      El altruismo con lo que vemos y con lo que no vemos. El altruismo activa los mecanismos de recompensa del cerebro. Activa los mismos mecanismo que la cocaína. 
      El ejercicio físico, el sexo, una buena comida, una copa con amigos etc.
      El pensar en el otro o en los otros nos proporciona bienestar.
     El dinero, no está constatado que otorgue mucho bienestar. Exceptuando aquellas situaciones de ínfima pobreza que  un poco de dinero te puede dar mucho bienestar en el resto de situaciones una vez conseguido un cierto nivel de vida el dinero no cuenta como factor que otorgue bienestar.
      La edad es un factor a tener en cuenta en cuanto que todo los humanos hasta los 25 años estén donde estén tienden a ser y a sentirse felices. De los 25 as los 60  años ya es más complejo porque existen varios frentes de negocio, trabajo, familia hijos que afectan a todo esto. A partir de los 60 aumenta el bienestar normalmente, porque decrecen también las expectativas  que generarían situaciones estresantes. 



NEUROCIENCIA Y CREATIVIDAD :



           En cuanto a la creatividad debemos dejar claro que no existe porque si ese momento "eureka" mágico de una idea única y creativa. Eso no es posible. Para ello hace falta :
      -Preparación. Estudio, tiempo, educación, disciplina, años que nos dan la posibilidad no la seguridad de que en un momento pudiera  aparecer ese momento mágico. 
      -Incubación:   es necesario pensar obsesivamente una idea. 
      -Poner muchas veces el cerebro en Off o en reposo, cuando estamos sin hacer nada, vamos en el bus, etc . eso es necesario y muy importante para el cerebro. Es el momento en que que el cerebro está procesando informaciones que antes hemos recibido. 
     - Es necesario estar un  poco loco o soñador para que aparezca algo creativo. 
      -Estar preparado para el error, el fracaso, la equivocación. La sociedad, la educación, la familia etc. estigmatizan en exceso el error  y la equivocación. Es necesario equivocarse. Los grandes científicos se equivocaron mucho antes de ser creativos. 
      - El contexto en el que nos ha tocado vivir también tiene su importancia. Así vemos como en el Renacimiento se producen una gran variedad de creación o como hoy día se da en Sillicon Valle, con las nuevas tecnologías.
      -Tener en cuenta que todos tenemos un potencia de ser creativos, pero necesitamos poner las herramientas previas.
NEUROCIENCIA Y  TOMA DE DECISIONES IMPORTANTES: 
      Lo primero es pensar como decidimos. El hombre hace 30000años tenía el mismo cerebro que hoy, y sus tomas de decisiones eran rápidas, intuitivas, porque eran tomas de decisiones para sobrevivir, si no era rápido al disparar a una sombra la posibilidad de que un oso lo matara era grande. 
      Antes de hablar sobre ello debemos dejar claros dos princípios al respecto:
      -  Para el hombre es más importante sobrevivir que la verdad. 
      -  Para el hombre es más importante pertenecer a una tribu a un grupo humano que la verdad. 
       Es importante eso para ver como nos desenvolvemos. Vamos por la vida moviéndonos en un mundo ambiguo con nuestros esquemas mentales personales y vamos buscando aquello en lo que coincidimos en lo que nosotros pensamos  y vamos ignorando aquello con lo que no coincidimos.    
       O sea no utilizamos un sistema racional, lógico, analítico de búsqueda de la verdad. Ese sistema desgasta el cerebro y consume energía. Por otro lado en el noventa por ciento de los casos utilizamos un sistema automático de nuestro cerebro basado en nuestra experiencia en aprendizajes y emociones que realizamos casi sin pensar. Las cosas con las que no coindicimos las olvidamos más rápido. 
      No podríamos vivir en modo racional  porque nuestros recursos cognitivos son limitados. 
      Al hilo de esto la neurociencia no da respuesta al dilema eterno de si existe o no el libre albedrio. Hoy día hay pensadores que dan a ello respuestas variadas. Es evidente que el contexto en que nos movemos influye en gran medida en nuestra toma de decisiones. Varios nobeles de economía  defienden que nuestras decisiones son engañosas, creyendo que forman parte del libro albedrío aunque en realidad están motivadas por el contexto y en gran parte inducidas por publicidad etc. 

NEUROCIENCIA Y  MEMORIA: 

       En primer lugar debemos decir que no hay una caja específica en el cerebro para la memoria y los recuerdos. El cerebro trabaja en red y todo forma parte del proceso de la memoria. 
      Debemos decir que hay varios tipos de memoria. Una EPISÓDICA, entendiendo por tal  la del donde y cuando de hechos diarios o de sucesos y experiencias. La SEMÁNTICA que nos sirve para dar nombre a las cosas y que no sabemos cuando aprendimos cada uno de esos nombres o esas definiciones. La basada en la EXPERIENCIA, que es la memoria de los hábitos, que nos permite realizar cosas constantemente sin pensar gasto energético, como andar en bicicleta etc. La memoria ONLINE que utilizamos por un poco tiempo y después la borramos, como el caso de que te dan un ajo, de corta duración. 
      Ahondando más en el concepto viene muy bien  la frase de García Márquez: "la vida no es lo que vivimos sino como recordamos lo que hemos vivido".  ¿Que quiere esto decir ?. Que la memoria es evocación, en parte es un acto creativo de nuestra mente que continuamente van trabajando en los hechos recordados y los va perfeccionando o moldeando de tal modo que la memoria de aquellos años son como fue la última evocación que hemos hecho de ellos, ya no nos trasladamos exactamente a ellos sino que los vamos contando a través de los recuerdos que vamos haciendo de ellos. Estamos reconstruyendo los hechos. Para nosotros son como los recordamos tal como los hemos vivido. 
     Es necesario olvidar para captar nuevas memorias no podríamos vivir recordando todo, seríamos prisioneros del recuerdo. Tenemos tendencia a acordarnos más de aquello que tiene relación con las emociones. 
      Con el tiempo se va perdiendo memoria, especialmente los nombres, ya que es difícil unirlos a emociones, pero eso no tiene que ver nada con el Alzheimer ya que incluso personas más jovenes pueden tener pérdidas de memoria por estrés, falta de ánimo, falta de atención normalmente etc. 

COMO PODEMOS MANTENER EN FORMA NUESTRO CEREBRO. 
      1.- Somos sociales. Tenemos que estar conectados con vínculos humanos. No aislarse. Los vínculos con otras personas protegen nuestro cerebro. 
      2.- Optimismo. 
      3.- Ejercicio físico. La actividad física, el deporte, aumenta el ánimo, la creatividad, aumenta nuevas conexiones cerebrales. 
      4.- Mente activa. No sólo con lo que sabemos. Sino aprender cosas nuevas. Un idioma, Un instrumento. No se puede jubilar uno en la vida tener pasiones y estar activo.    
      5.- Buena dieta y alimentación. Frutas, verduras, omega 3. 
     6.- Manejar el estres y las dificultades en la vida. La realidad nosotros no la podemos cambiar, pero si  el modo  como reaccionamos ante esa realidad. 
      Hoy sabemos que la manera en que pensamos determina la manera en que sentimos. Es decir si yo pienso que estuve  bien en una charla con gente  y que no se aburrieron( forma de pensar), eso me va a hacer sentir bien  ( forma de sentir). Y en el caso contrario  produzca al revés mal para mi cerebro. 
      Uno realmente crea la realidad. Por eso debemos crearla de forma positiva para enfrentarnos al estres. 
      7.- Dormir bien. El sueño es salud. Ayuda a ser más inmunes, protege la memoria, es necesario para el funcionamiento normal del cerebro. 
LOS PREJUICIOS SOBRE LOS OTROS. 

      Los prejuicios sobre los otros, aquellos que  no pertenecen a nuestra identidad, a nuestra tribu, están arraigados profunda e inconscientemente en  nuestro cerebro y son difíciles de erradicar. En esa creación desde niños de esquemas mentales y egos vamos creando esquemas primarios sobre nuestra tribu, nuestra identidad.  Es difícil de erradicar porque si alguien te quiere convencer de lo contrario a tu pensamiento lo tiene difícil porque tu te vas a defender como un ataque a tu identidad, que es un prejuicio que tienes interiorizado y muy fuerte. Hoy nos encontramos con una defensa natural de la tribu y un mundo global y el contacto con el diferente sobre el que tenemos prejuicios. ¿Como progresar o resolver esto ?. Sólo hay una solución y es la EMPATIA. Esta tiene que ser la palabra del futuro de la humanidad, Educarnos en saber que es el otro y como siente el otro. Es la clave del futuro. 

COMO PROGRESAR EN EL APRENDIZAJE DE LA EDUCACIÓN. 
      Para aprender mejor en la infancia valen las recetas que dimos para mantener en forma nuestro cerebro. Buena nutrición, luchar contra el estres crónico y la ansiedad. Hacer ejercicio físico que baja la ansiedad, aumenta la creatividad. Dormir Bien. Involucrarse en el aprendizaje por parte del alumno, con debates, opiniones etc. No aprender todo de golpe, hacerlo en intervalos. Realizar una autoevaluación personal sobre como aprendo. Jugar. 
     Al respecto tenemos que reinventar el papel del docente. Reinventarlo y potenciarlo es importantísimo, ya que nadie va a suplir el contacto humano que significa. Ahora  bien  el docente de hoy ya no es un transmisor del conocimiento. Hoy el conocimiento lo tiene a mano el chico, lo que hay que saber es enseñarle que hacer con ese conocimiento, como conseguir trabajar en equipo para demostrar que se consigue el éxito consiguiendo una memoria colectiva etc. 

     Conclusión. 
    Vivimos en la era del conocimiento. La mejor inversión es invertir en el cerebro de los ciudadanos através de la educación, la empatía, el afecto. Creer o remover los obstáculos para que la meritocracia sea real en nuestra sociedad y que un  niño pueda creer que si estudia mucho, trabaja, es honesto, tiene empatía, es altruista, le va a ir mejor en la vida. 


   


viernes, 15 de marzo de 2019

Técnicas y habilidades para el abogado.

Los 30 mejores juristas de la historia


 

Por Raúl Ochoa Marco, socio-fundador de Ochoa-Marco & Asociados

Cómo transmitir con eficacia el alegato que hemos preparado por escrito

No sólo se requieren conocimientos técnicos acerca de la materia objeto de litigio, sino que es necesario la adquisición de una serie de habilidades que refuercen nuestra presencia en sala.

En términos generales, el vocablo alegato – en latín allegatus – hace referencia a una locución, un testimonio o una exposición que se pronuncia en contra o a favor de una persona o de algo.
De acuerdo con lo establecido por el diccionario de la Real Academia Española, se denomina alegato a la presentación que realiza el Abogado para fundamentar el derecho que tiene la parte que sostiene la defensa y para refutar las razones esgrimidas por la parte que ejerce la acusación. Esta expresión confiere al Letrado la facultad de realizar un planteamiento contrario al aducido por la otra parte para que, acto seguido, pueda analizar las pruebas, impugnar los argumentos de la contraparte y llevar a cabo una fundamentación jurídica de sus pretensiones con base en la legislación y jurisprudencia aplicable.
De lo expuesto se colige que el alegato consiste en un análisis crítico de la prueba efectuada en autos, tratando de convencer y persuadir al Juzgador para dictar una resolución favorable a sus intereses.
Empero, no sólo se requieren conocimientos técnicos acerca de la materia objeto de litigio, sino que es necesario la adquisición de una serie de habilidades que refuercen nuestra presencia en sala.

Preparación de la estrategia jurídica y estructura del alegato

Aunque es fundamental la agilidad mental del abogado, en ningún caso se recomienda dejar cualquier circunstancia o evento a la improvisación; ello sólo genera desconfianza, tensión y pérdida de atención del letrado respecto de todo aquello que ocurre en sala en los momentos previos a su intervención.
El abogado que actúa en Sala no tiene oportunidad de sustituir las palabras y frases ya emitidas; obviamente, no puede memorizar un guión concreto porque es imposible conocer con exactitud todo lo que va a ocurrir en el transcurso del proceso. Por tanto, se recomienda la elaboración de una estrategia jurídica tras el estudio del asunto en profundidad y de las normas procesales, así como, preparar el proceso judicial de forma minuciosa con anterioridad a que el mismo comience, buscando el camino más factible para los intereses del cliente.

A.- Momentos previos al juicio

El conocimiento exhaustivo del objeto de litigio permite al abogado perder el miedo y eliminar los nervios y la inseguridad propios de un procedimiento judicial, a fin de mostrar máxima confianza en su actuación.
No obstante, antes de acudir al acto del juicio, es recomendable obtener toda la información posible acerca de las cualidades del Juzgador, pleitos diarios que conoce, criterios jurídicos, etc; con la finalidad de que el abogado pueda hacerse una idea, lo más certera posible, del foro donde va a actuar.

B.- Preparación del cliente para el acto del juicio

Para alcanzar un veredicto favorable no es suficiente solo con las alegaciones vertidas en el plenario, ni el resultado de las pruebas practicadas, sino que es necesario algo más.
Entre estos factores que pueden incidir en el fallo, la primera impresión representa un papel fundamental, ya que el Juzgador, normalmente, no conoce a las partes y, por tanto, según sea positiva o negativa, esa primera impresión condicionará, en cierta medida, el veredicto final.
En ocasiones, es recomendable suavizar o modificar el aspecto exterior del cliente, pues es cierto que hay personas que pueden encajar en un cliché determinado, que no favorezca en absoluto a la estrategia que el abogado pretende seguir. De igual forma, debe cuidarse la propia presencia del letrado; guardando siempre una cierta armonía con la función que éste ejercita en sala, porque todo aquel elemento que invite a fijarse más que en el alegato jurídico puede distorsionar la atención del juez.

C.- La entrada en sala

En el momento en el que el letrado entra en sala debe conocer el lugar exacto del estrado en que debe colocarse. Además, es fundamental establecer un vínculo de empatía con el Juzgador, así como con el Letrado Colaborador de la Administración de Justicia, sin perder la compostura y el debido respeto. A tal efecto, no se recomienda establecer comunicación visual directa con el Juzgador, pudiendo considerarse como un gesto intimidatorio; es decir, al Juez no se le debe mirar directamente a los ojos, sino al entrecejo.

D.- El comportamiento del abogado en Juicio

Si se consigue cierto grado de empatía entre el letrado y el Juez, se garantiza que, al menos, esté receptivo a escuchar el alegato que el abogado efectúe en el acto del juicio. Por tanto, hay que evitar cualquier acto que pueda enfrentar al abogado con el Juez y buscar siempre situaciones beneficiosas, como es comenzar aquellas frases que puedan contravenir al Juzgador con oraciones como  “Con el debido respeto, Señoría…” o “Como conoce su señoría…”.
En lo que respecta a los interrogatorios, toda actuación del abogado debe estar interrelacionada, por lo que es fundamental realizar una escucha activa durante todo el acto del juicio. De esta forma, se logra un análisis lógico y rápido de las preguntas y respuestas; eludiendo la mala praxis de repetir preguntas ya formuladas por las otras partes, evitando las llamadas de atención del Juez y, en consecuencia, la pérdida de concentración.
Además, debe tenerse presente a la hora de proceder a realizar el interrogatorio de los testigos, evitar, si éste ha sido muy conciso en hechos que no favorecen, volver a formular preguntas relacionadas. De esta forma, se consigue que, en el supuesto que el Juez hubiera pasado por alto tal afirmación, pueda indagar sobre dicho extremo. Es decir, el abogado debe controlar y dominar, en función de las respuestas obtenidas, cuándo debe dar por finalizado el interrogatorio, aun cuando, apenas hubiera formulado preguntas al respecto.

E.- Sintetizar

Un conocimiento exhaustivo y claro acerca del objeto de defensa, permite elaborar un alegato pulcro, limpio y entendible, aportando únicamente aquellos datos verdaderamente relevantes a la causa defendida. Ello implica, conocer exhaustivamente el asunto enjuiciado, pudiendo sintetizar aquellos hechos y acontecimientos que rodean al mismo, evitando aportar datos que empecen la resolución del asunto y generen confusión y oscuridad.
No debe olvidarse que, hoy en día, se premia la brevedad y concisión en la exposición en público. En consecuencia, a la hora de elaborar un alegato, lo primordial es llamar la atención del juez, mediante frases o palabras clave para este fin, cuidando mucho el estilo y la forma; ya que, cuando alguien habla de forma enrevesada, compleja, pareciendo un erudito, se debe a que, realmente, no tiene conocimiento material del asunto, sino que está repitiendo aquello que no ha llegado a comprender.

Captar la atención a través del alegato

La comunicación en sala no es más que transmitir aquello que hemos estado preparando y estudiando, para que sea escuchado y atendido; en suma, conseguir fijar la atención del Juzgador con lo expuesto en nuestro alegato.
El subirse al estrado conlleva estar en tensión, lo cual no significa estar nervioso, sino estar atento; haciendo uso de las sinergias que nos permitan mantener una actitud creativa, diferente a la habitual en los foros, que mantenga activa la escucha del Juzgador en el momento de realizar nuestro alegato final.
La comunicación en sala, como ya se ha expuesto, se lleva a cabo a través de un lenguaje verbal y no verbal. Por tanto, desde que se entra en sala hay que despertar un cierto interés en aquél que nos va a escuchar; por ello es igual de importante la entonación de la voz como la postura del abogado en el estrado.

A.- La postura

La comunicación no verbal del abogado condiciona, en ocasiones, la orientación del fallo, pues, a través de la misma, puede reforzarse la tesis defendida por el abogado o, por el contrario, desbaratar completamente la misma.
Así, deben evitarse aquellas posturas que generan en el Tribunal desconfianza sobre lo que el abogado está transmitiendo, y que reflejan cierta inseguridad en sus palabras; tales como sentarse en el borde de la silla, balancear la misma mientras habla, esconder las manos debajo de la mesa, tocarse el pelo en repetidas ocasiones, cruzar los dedos de las manos o, incluso, sostener un bolígrafo.
A modo de ejemplo, el sostener un bolígrafo entre las manos en el momento de comenzar el alegato, únicamente genera un efecto hipnótico en el Juzgador, distrayéndole de las palabras emanadas por el letrado, lo que ocasiona desconexión, y, por ende, se bloquea su escucha activa.
Así, la postura que debe tener el abogado en el momento en el que interviene debe ser la de un presentador de televisión en el momento de dar una noticia muy importante: manteniendo cierta inclinación hacia delante, colocando el brazo derecho apoyado sobre la mesa. De esta forma, el orador refleja máxima seguridad en lo que dice, provocando predisposición en el oyente para escuchar con atención lo que se le transmite.

B.- La voz

La entonación de la voz durante el alegato es fundamental a la hora de conseguir la atención del Juzgador. Es posible que el argumento esgrimido en el informe final sea, técnicamente, muy sólido pero si, el mismo, no es escuchado activamente por el Juez, se convierte en un argumento vacío y sin relevancia alguna en el proceso.
Por ello, el letrado debe tener suma cautela antes de intervenir en el alegato final, valorando psicológicamente la actitud que el Juzgador ha tenido durante la tramitación del acto del juicio, así como el tiempo que ha durado este y, por último, la hora en la que el mismo tiene lugar. Así, en el hipotético caso de que fuese el último juicio del día y fuera a una hora avanzada, el abogado debe reducir al máximo la duración de su informe, siendo breve y conciso.
Para que la intervención del abogado tenga el efecto deseado, se requiere tener preparado previamente la estructura del alegato; lo cual no significa leer un guión, sino tener unas pautas que sean acordes a la estrategia judicial seguida durante el proceso.
En este sentido, hay que intentar focalizar la atención del Juzgador. En ocasiones puede ser de ayuda para conseguirlo comenzar la intervención con una frase excéntrica, que provoque su atención; de esta forma, será más fácil que el Juez escuche el alegato del abogado de una forma activa y comprometida.
Una vez que hayamos conseguido esto, el informe no debe ser nunca monótono, aburrido ni lineal; sino que deberá hacerse en voz alta, sin vociferar, vocalizando correctamente, haciendo énfasis y entonando de manera especial aquellas palabras que resulten más relevantes para la resolución del asunto, según nuestro interés.
Desde la experiencia de más de veinticinco años ejerciendo la abogacía en los Tribunales, puede concluirse que los pleitos se ganan y se pierden por detalles; por lo que es fundamental idear una estrategia previa que contenga todas las recomendaciones mencionadas en este artículo, que nos permitan alcanzar el objetivo diseñado.

viernes, 8 de marzo de 2019

Notas de Historia. LOS INCAS.

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Un acercamiento al Imperio de los Incas y a la conquistas española, de César Vidal, en su página Web.
       En la misma línea del comentario anterior  y por  novedoso para mí , tratándose del autor, César Vidal, es ilustrativo y curioso el comentario  colgado en  IVOOX, sobre la conquista de España en América. No es ser antiespañol, sino que es ver la historia en crítica o poner en cuestión ciertos relatos en la difícil busca de la Objetividad histórica.


Los Incas.   Por César Vidal.

"Entre las muestras de incomprensión e ignorancia que se repiten en relación con el continente americano se encuentra la de igualar a las distintas culturas que lo poblaban antes de la llegada de los europeos.
No cuesta muchos descubrir que esa visión deriva de un discurso falso e interesado porque, por muchas vueltas que se quiera dar al asunto, no se puede comparar a los nómadas apaches o a los semi-nómadas sioux con culturas imperiales como las de los incas o los aztecas. Por utilizar una comparación fácil de entender sería como considerar iguales en términos culturales a los bosquimanos y a los atenienses de la época de Pericles o a los cazadores de cabezas de Borneo y a los romanos del tiempo de Cicerón. En ese sentido, el imperio inca constituye una de las construcciones más prodigiosas de la Historia de la Humanidad y se encontró por encima de cualquier cultura hallada por los europeos a su llegada al continente. Nunca después y seguramente nunca antes existió una cultura amerindia tan elevada.
Tras Pachacutec – un personaje que, seguramente, desconocerán muchos de mis lectores, pero que tuvo la altura política de un Tutmosis III o un Julio César – el imperio inca se extendía desde Perú, Bolivia y el Ecuador, en el norte, hasta Chile y el norte de la Argentina, en el sur. En otras palabras, ese imperio no tenía nada que envidiar al de Alejandro Magno.
De manera bien reveladora, ese imperio experimentó un proceso de expansión muy parecido al de la Historia de Roma, pero en un paréntesis temporal no de más de siete siglos – como en el caso romano – sino de poco más de uno. Partiendo también de una ciudad – en este caso Cuzco – los incas fueron federándose con los vecinos – como Rómulo, el fundador de Roma y sus sucesores – y acabaron transformándose en un imperio extraordinario.
Desde no pocos puntos de vista, para ser justos, los incas superaron a los romanos. Arquitectónicamente, eran, desde luego, más duchos a la hora de trazar las calzadas o los acueductos, pero además lograron forjar unas técnicas de cultivo – las prodigiosas terrazas – que no disfrutaron los labriegos romanos. Por lo que se refiere a sus construcciones ciclópeas muestran una destreza que en nada desmerece de la mostrada por los egipcios que alzaron las grandes pirámides. A decir verdad, los incas los superaron en aspectos muy concretos a los que me referiré en el futuro. También fueron superiores los incas a los romanos en áreas como la medicina – eran maestros de la trepanación y conocían la anestesia – o la astronomía en la que destacaron de manera prodigiosa. Se dice que no conocían el alfabeto. No lo creo. En realidad, me temo que, como sucedió con el linear B o con otras formas de escritura que se han resistido a ser descifradas, todavía no hemos dado con la clave de su escritura, pero que esta se encerraba en su prodigioso lenguaje de nudos. Y es que, ciertamente, resulta imposible creer que semejante bagaje de conocimiento se pudiera transmitir sólo de forma oral.
Políticamente, los incas supieron también arquitrabar un estado del bienestar que algunos, como Louis Baudin, han definido, quizá con cierto atrevimiento, como socialista. Que el estado se ocupaba de los ancianos y de los enfermos, que atendía a viajeros y caminantes y que carecía propiamente de un sistema impositivo porque la práctica totalidad de lo recaudado era simplemente reciclado solidariamente no admite discusión. De hecho, el sistema había funcionado también que, cuando llegaron los conquistadores y los frailes y comenzaron a privar a los indígenas del fruto de su trabajo, éstos creyeron, al principio, de la manera más ingenua, que sólo se trataba del viejo sistema de redistribución incaica. Por desgracia, había pasado a la Historia para verse sustituido por un sistema impositivo expoliador en favor de las castas privilegiadas - ¿le suena al lector? – que precipitaría en la miseria y la muerte a los indígenas. Que el sistema no era perfecto es obvio. Que en no pocas naciones de herencia hispano-católica no se ha llegado a su altura a día de hoy es más que indiscutible.
No caigo en una idealización del pasado inca. No fueron, desde luego, los monstruos que quisieron pintar conquistadores y frailes para justificar su expolio. Tampoco fueron santos. Igual que podían ser generosos y magnánimos hacia sus enemigos, podían ser duros y convertir el cráneo del jefe vencido en copa para el banquete como hizo Atahualpa con su hermanastro Huáscar. Pero no es menos cierto que los incas acabaron con los sacrificios humanos que practicaron otras culturas anteriores como la del señor de Sipán; que jamás quemaron a nadie por sus ideas religiosas como los frailes y los conquistadores y que pudieron llevarse los dioses de sus enemigos vencidos a Cuzco, pero para honrarlos y no para destruirlos ya que, como los romanos también, eran grandes receptores de otras divinidades. Se mire como se mire, incluso con sus excesos, los reyes incas fueron mucho más clementes y tolerantes que los conquistadores y los frailes y, desde luego, mucho más respetuosos de la libertad religiosa de sus súbditos a los que nunca habrían abrasado en piras por creer de manera diferente.
Sin duda, el sufrimiento de un apache muerto a manos de un europeo es equiparable al de un inca caído ante otro. Sin duda, el dolor de un sioux recluido en una reserva es equivalente al de un inca arrojado de sus tierras. Sin embargo, ni sioux ni apaches fueron empleados en las minas de metales preciosos desde los cinco años hasta morir de agotamiento; ni tampoco contemplaron cómo sus mujeres eran convertidas en prostitutas y concubinas por los vencedores blancos – algunos utilizan el eufemismo “mezclarse” para definir y ocultar semejante conducta de depredación sexual - sin que el clero dijera una sola palabra en contra ni mucho menos asistieron al terrible espectáculo de ver destruida una de las culturas más elevadas de la Historia humana por la sencilla razón de que no la tuvieron. Sí sucedió así con los incas. El aniquilamiento de su cultura fue más profundo y concienzudo que el que los bárbaros del norte ocasionaron en Roma – los bárbaros, por ejemplo, no levantaron templos a Odín sobre las iglesias ni obligaron a adorar a Thor so pena de hoguera – e incluso superior que el que los musulmanes perpetraron en Oriente Medio e incluso en los primeros siglos de Al-Ándalus porque aquellos fanáticos permitieron que judíos y cristianos, con condiciones gravosas si se quiere, pero condiciones a fin de cuentas, siguieran practicando su fe y, desde luego, no siempre convirtieron en mezquitas las sinagogas y las iglesias. Los incas, por el contrario, se vieron sometidos a condiciones peores y jamás disfrutaron ni siquiera de tan limitada tolerancia. A decir verdad, conquistadores y frailes arrasaron y expoliaron todo a su paso. Que se desee negar semejante hecho apelando a unas leyes que no sólo no eran tan humanitarias como se pretende sino que jamás se cumplieron o alegando que las esclavas indias disfrutaron de una “baja laboral” – a veces se leen cosas que obligan a dudar de la salud mental del que las escribe - constituye un sarcasmo delirante cuando no una justificación de un océano de crímenes que avergüenzan a cualquier miembro del género humano que haya conservado un mínimo de sensibilidad hacia el dolor ajeno. De la extraordinaria – realmente incomparable - cultura inca, sólo quedaron – como veremos en entregas sucesivas – o los cimientos de extraordinarios edificios sobre los que se levantaron conventos y catedrales o aquellos lugares, como Machu Pichu, adonde no llegaron - ¡gracias a Dios! - frailes y conquistadores. Es más que revelador. Algunos consideraran que semejante cataclismo cultural y humano es algo de lo que hay que presumir y jactarse. Partiendo de esa mentalidad nada puede extrañar los desastres que se ven a uno y otro lado del Atlántico. Pero de los incas y del Perú seguiremos, Dios mediante, departiendo en sucesivas entregas."