SER FELIZ. Saber gestionar las emociones I.

     La felicidad no es lo que nos pasa, sino como vemos lo que nos pasa. Es la actitud ante la vida. El sentido que le damos a la vida.

     El Optimismo y la alegría es una garantía de salud.

      FELICIDAD:  Es querer lo que uno hace. No hacer lo que uno quiere. No es sólo el bienestar que afecta a los  sentidos. Es algo que colma el corazón.

     El único antídoto para el sufrimiento es el   AMOR. Amor a un ideal, amor a una persona o personas.

      El sentido del recuerdo positivo, aferrarse a  cosas del pasado  hace más feliz a la persona. El recuerdo plancentero genera  dopamina y serotonina, con lo que el recuerdo de algo placentero genera más felicidad que el vivir la propia experiencia.

     LA FELICIDAD Y EL LENGUAJE. El lenguaje tiene una gran importancia en la felicidad y en nuestras emociones. Hay tres palabras fundamentales que generan y ayudan en la felicidad.

     POR FAVOR  Toca el corazón, y abre nuestras puertas a otras personas.

     GRACIAS.   Es una memoria del corazón.

     PERDÓN: Es tal vez la más curativa y la que ayuda a superar traumas del pasado. El perdón incluye el perdonarnos a nosotros mismos por nuestros errores y el perdonar a los demás por los males que nos hayan hecho.

                   LA FELICIDAD es haber  superado los traumas del pasado, ilusionarte con el futuro y vivir instalados en el presente.

        Cuando vivimos  enganchados en el pasado:   nos enfrentamos a la DEPRESIÓN.

        Cuando vivimos   oprimidos  y angustiados por el  futuro:  ANSIEDAD.

          La felicidad está en saber vivir el presente, es ahí donde se consigue el equilibrio personal.

  

          El  CORTISOL.  La hormona del stress y la supervivencia. Es la que nos hace reaccionar ante el peligro o situaciones estresante. Es fundamental para la vida, pero fatal cuando está más tiempo del que la necesitamos, y lo malo es que nos puede salvar la vida, pero puede arruinar nuestra felicidad, si no la conocemos y no sabemos como se produce. 

       Cuando se activa esta hormona,  tarda entre seis y ocho horas en bajar a su nivel normal. Aunque  pueda darse el caso que se activa incluso cuando hagamos  un ensayo de  supervivencia por ejemplo, porque tendemos a situarnos en la situación real. Sube muy rápido, baja muy lenta. Sólo de pensar en cosas negativas nos sube el Cortisol como si realmente estuviesen  sucediendo o viviendo situaciones que no nos gustan y a las que tenemos que enfrentarnos. Sufrimos continuamente por cosas que no van a pasar pero que  nos hacemos creer que nos van a pasar y todo ello nos  sube el cortisol. Así como si pensamos que nos ha tocado un   premio o en la imaginación de que nos tocase,  se eleva  por placer nuestro  nivel de dopamina y serotonina, al revés, las preocupaciones, el mal ambiente familiar o laboral, situaciones tóxicas, enfados, envidias, celos, etc.  elevan el cortisol. Vivimos con la ansiedad y preocupados por cosas que nos pueden pasar pero que normalmente no pasan. Todo ello eleva el Cortisol y sufrimos como si esas cosas sucediesen.

      ¿ Que pasa cuando hacemos que en nuestra vida se llegue a una situación crónica de  subida de Cortisol, por estrés, preocupación tensión, mal trato  familiar, problemas económicos  etc. ?. Produce dos efectos:  Psíquico y físico. 

       Pérdida de pelo, temblor de ojos, problemas para tragar, colon irritable. infecciones de  repetición, artritis, fibromialgia, taquicardias etc. , síntomas físicos.

       En cuanto a los psíquicos: cambio en patrones de sueño, fallos de memoria   ( mucho estrés bloquea con el cortisol la parte del cerebro de la memoria inmediata). Irritabilidad en nuestras relaciones. El camino a la depresión.

     COMO PUEDO BAJAR EL NIVEL DE CORTISOL CRONICO.

     1.- Hacer ejercicio físico.   A través del hígado se elimina con el ejercicio cortisol.

     2.- Detectar en tu entorno a la persona o personas tóxicas. Son las personas que al estar cerca te enfadan o irritan  o te dicen aquello que  te da en el punto , que te desestabilizan en tu equilibrio y no las das controlado. Estas   te van a  subir el cortisol. Estas personas te hacen vulnerable y tu te das cuenta y no lo puedes remediar, pero elevan tu cortisol. Una frase, un comentario, etc.

      Puede haber un tóxico universal que genera mala vibración para todo el mundo, pero puede haber tóxicos personales, que sólo nos afecten a nosotros. Si es personal, preguntarnos: porque me afecta tanto lo que me dice, y que me genera lo que me dice. Puede ser que un tóxico sea tal porque por ejemplo se considera inseguro ante ti, y su frases sean una coraza de ataque y  lo hace en público o en privado. El examinar esa causa puede funcionar para abstraer la toxicidad lo mismo que tratar de poner un impermeable psicológico que  nos impida recibir la toxicidad.

    3- Buscar la compañía de la persona Vitamina. Aquella que te da optimismo y alegría y te diga lo que te diga no te vas a sentir vulnerable. Su compañía te ayuda a bajar el cortisol.

    4.- Pensamientos positivos. Desterrar lo más posible los pensamientos negativos en general tratar de llenar todo de CURIOSIDAD, ILUSION, OPTIMISMO. Este último  produce una neurogénesis,  que regeneran las neuronas . El optimismo  y la ilusión se ha demostrado que regeneran neuronas  muertas en el hipocampo  cerebral del aprendizaje. 

5.- Meditación. Diez minutos al día para encontrarnos sólo con nosotros, con el vacio. No para meditar nuestros problemas, es al revés, serían diez minutos de relax personal.

6.- Alimentos con Omega 3.  es un antiinflamatorio, lo contrario del Cortisol que es inflamatorio. El estrés ataca aquellas partes vulnerables o débiles del cuerpo. Es un multiplicador o creador de enfermedades graves.